Hace algunos días aquí en el blog les informábamos sobre la reciente decisión que tomaron los desarrolladores de Ubuntu en donde a partir de la versión 19.10, Ubuntu ya no soportará ni creará paquetes para la arquitectura de 32 bits. Con la llegada de Eoan Ermine, Ubuntu estaría cerrando completamente el cierre de la arquitectura de 32 bits.
Ante esta decisión algunos desarrolladores están preocupados ya que esta decisión podría causarle mas problemas que beneficios al sistema, pues ya ha desembocado en la respuesta de Wine sobre dejar a Ubuntu 19.10 sin soporte.
Y es que a pesar de que este movimiento no es del todo inesperado, pues los desarrolladores de Ubuntu habían dicho previamente que tomaría una decisión sobre ello.
Una vez que se dio la vuelta, el equipo de ingeniería de Ubuntu dice que:
«hemos revisado los hechos que tenemos ante nosotros y llegó a la conclusión de que no debemos continuar con i386 como una arquitectura «.
Will Cooke señala que:
«Ante la gran posibilidad de que no incluyamos i386 como arquitectura de lanzamiento en 20.04 LTS, tomamos la medida proactiva para deshabilitar las actualizaciones de 18.04 a 18.10 para los sistemas i386 para evitar que los usuarios queden atrapados accidentalmente en una versión provisional con 9 meses de soporte, en lugar de dejar que sigan ejecutando Ubuntu 18.04 LTS con sus 5 años de soporte estándar».
Ante ello los desarrolladores de Wine están entre los que no están contentos con la decisión.
Desarrolladores de Wine contra el abandono de 32 bits en Ubuntu
El proyecto Wine expresa críticas masivas del plan de Ubuntu para dejar de ofrecer paquetes de 32 bits para la arquitectura x86, ya que esto causará muchos problemas al proyecto y los usuarios.
Ya que en Wine comentan que en caso de que se abandone el soporte a paquetes de 32 bits en Ubuntu 19.04, estas versiones de Ubuntu y las consiguientes que continúen con ello se quedarían oficialmente sin soporte para Wine.
Y no es por mero capricho de los desarrolladores de Wine, si no que ya que las versiones actuales de Wine para distribuciones de 64 bits se basan en Wine32 y requieren bibliotecas de 32 bits.
Por lo general, en entornos de 64 bits, las bibliotecas de 32 bits necesarias se envían en paquetes multiarch, pero en Ubuntu se decidió detener completamente la creación de dichas bibliotecas.
La razón de esto es bastante fácil de entender: muchas aplicaciones de Windows continúan usando el código de 32 bits en su totalidad o en parte.
Esto debe ser compatible con el proyecto Wine para poder ejecutar las aplicaciones de Windows solo bajo Linux.
Los desarrolladores de Ubuntu ven esto un poco diferente y señalan que muchas aplicaciones podrían ejecutarse mientras tanto, simplemente con la variante de 64 bits de Wine.
Para los otros programas, el equipo de Ubuntu se refiere a la capacidad de usar Ubuntu 18.04, que es oficialmente compatible con la arquitectura de 32 bits hasta 2023.
Esta versión también se puede ejecutar en un contenedor. Con un reenvío de la tecnología gráfica al contenedor, los juegos antiguos de 32 bits pueden continuar ejecutándose en las versiones actuales de Ubuntu.
Un que una forma de superar estos problemas podría ser utilizar la tecnología multiarch en las futuras versiones de Ubuntu de la arquitectura de 64 bits.
Esto facilita el uso de bibliotecas de 32 bits como un entorno de ejecución en la versión de 64 bits.
Otra posible solución de Ubuntu para usar Wine en 32 bits en el futuro, que consiste en publicar aplicaciones como snaps o usar un contenedor LXD basado en Ubuntu 18.04 LTS que tiene acceso completo a multiarch WINE de 32 bits y bibliotecas relacionadas, también fue discutida por los desarrolladores de Wine,
Aunque en Wine argumentan que no tiene sentido poner mucho esfuerzo en esta solución temporal. El mantenedor del repositorio de Wine también mencionó que no le interesa mantener tantas bibliotecas.
Además de que informa que no desviara su trabajo en proponer soluciones temporales para un solo sistema y para sistemas de paquetes que no están dentro de sus planes de mantener.