Hace pocos se dio a conocer la noticia de que Nintendo presento una demanda contra el equipo detrás del proyecto de código abierto Yuzu, que se centra en el desarrollo de un emulador de la popular consola de juegos «Nintendo Switch». La demanda alega que el emulador Yuzu está siendo utilizado para jugar a juegos pirateados, lo que infringe los derechos de autor de Nintendo y viola sus términos de uso.
Para protegerse contra la piratería y la reproducción no autorizada de juegos, Nintendo utiliza claves criptográficas para cifrar el contenido del firmware y los archivos de juego en sus consolas. Estas claves son esenciales para desbloquear y jugar los juegos en una consola Nintendo Switch oficial. Nintendo afirma que el uso del emulador Yuzu implica la elusión ilegal de estas medidas de protección técnica.
El emulador Yuzu requiere que los usuarios obtengan las claves de descifrado del juego para ejecutar los juegos en el emulador. Aunque la obtención de estas claves generalmente se realiza mediante herramientas de terceros y es responsabilidad del usuario, Nintendo considera que el acto de descifrar los juegos en el emulador constituye una violación de sus términos de uso y una elusión ilegal de las medidas de protección de derechos de autor.
Incluso si un usuario utiliza las claves extraídas de su propia copia comprada del juego, esto infringe los términos de uso de Nintendo, que prohíben la reproducción de juegos en plataformas no autorizadas. Es por ello que nintendo busca una indemnización por el uso indebido del emulador Yuzu y busca una orden judicial para detener el desarrollo, promoción y distribución del mismo.
Nintendo también argumenta que la distribución del emulador Yuzu crea un ambiente propicio para la difusión de copias piratas de sus juegos. Esto se debe a que el emulador no sólo permite jugar juegos en la consola, sino también en computadoras convencionales. Desde la perspectiva de Nintendo, Yuzu se percibe como una herramienta que convierte las computadoras comunes en medios para infringir masivamente la propiedad intelectual y los productos protegidos por derechos de autor de la empresa.
La demanda destaca que uno de los desarrolladores de Yuzu hizo declaraciones públicas indicando que la mayoría de los usuarios del emulador utilizan claves pirateadas. Además, el sitio web de Yuzu contiene instrucciones para extraer claves (prod.keys) de las consolas y enlaces a herramientas para obtener claves y copiar juegos no autorizados para su ejecución en otros dispositivos. El manual de usuario de Yuzu también hace referencia a la necesidad de archivos del sistema copiados de una Nintendo Switch con jailbreak para que los juegos funcionen correctamente.
Con base en estos ejemplos, Nintendo sostiene que los desarrolladores de Yuzu estaban conscientes desde el principio de que su software estaba siendo utilizado para evadir medidas de seguridad y que sus acciones podrían considerarse como facilitadoras de la piratería. Además, Nintendo está preparada para demostrar que los desarrolladores de Yuzu violaron la ley DMCA al obtener claves de una consola pirateada mientras trabajaban en el emulador y al copiar juegos para su ejecución en el emulador.
Ademas de ello, como ejemplo de pérdida de ingresos debido a Yuzu, se menciona el juego «The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom», cuya copia pirata estuvo disponible una semana y media antes de su lanzamiento oficial para Nintendo Switch y se descargó más de un millón de veces. El 20% de los enlaces a descargas piratas de este juego mencionan explícitamente la ejecución en un emulador y se argumenta que los desarrolladores de Yuzu se beneficiaron de la aparición de copias piratas, como lo demuestra el aumento en el número de miembros que apoyaron a Yuzu en Patreon en el momento en que apareció la copia pirata. Los miembros de Patreon tienen la oportunidad de acceder a las primeras versiones de nuevas versiones de Yuzu.
Finalmente si estás interesado en poder conocer más al respecto, puedes consultar los detalles en el siguiente enlace.